Salir con la amante (sucursal, la otra, tu otro frente) y con la esposa (la firme, la bruja)

Si la anterior situación te pareció un exceso de intrepidez, considera esta otra posibilidad:  quizá no haya mas salida que volver a verse con ella (es decir la sucursal, la otra, tu otro frente),  estando tu o ambos acompañados de sus respectivas parejas.   Esto seria posible si en el segundo encuentro, dada su naturaleza, había sido imposible que los tórtolos se encuentren solos (sin la compañía de sus parejas).  Tal vez porque este segundo encuentro sucede en el aniversario de bodas de un amigo en común, o quizá se trata de una cena que tu ofreces para celebrar tu propio aniversario.

En concreto, se trata de situaciones en que no fue posible evitar que en ese encuentro hubiese acompañantes en ambos bandos.  No importa.  Para todos los fines, igualmente es útil que los dos se vuelvan a encontrar, con el fin de seguir adelante ese hermoso y fructífero proceso de conocimiento entre un hombre y una mujer que se atraen.  

Aquí siguen vigentes las mismas recomendaciones anteriores:  cuidarse del entorno, actuar con cautela para no llamar la atención y además.   

Si no fue posible evitar que este segundo encuentro fuera sin tierras (sombras, es decir acompañantes), quizá se consiga posteriormente uno, esta vez mas libre.   Ya para ese momento ella y tu tengan cierto tono de conversación que les permita hablar sobre la necesidad de encontrarse a solas en otro momento.    Mientras llega el día, aprovecha al máximo la fiesta y diviértete a lo grande.

Que ya vendra el tiempo que podras disfrutar con ella, (tu sucursal, la otra, tu otro frente)