Poniendo las cartas sobre la mesa: el momento definitivo

En el segundo o tercer encuentro,  es el momento definitivo o cumbre para el proceso, tu y ella se verán a solas en algún momento y lugar.    Supongamos la siguiente situación:  Tu llegas al parque donde quedaron de juntarse, ahí esta ella, te saluda a distancia con la mano.  Conforme se acercan, ella sonríe, su sonrisa es hermosa,  sus cabellos mecidos por el viento y sus ojos anhelantes.   Todo esta listo para poner las cartas sobre la mesa,  

Tu llegas, la saludas con cortesía y deferencia (quizá con un beso en la mejilla) y te sientas a su lado.  Después de las primeras palabras formales sobre el clima, transito,  permanecen unos instantes en silencio. 

Tú  la miras, sus ojos se topan, ella se queda seria; Es el momento de la estocada final:  es un momento en el que un cazador, un viejo corredor de pistas introduce el tema de fondo, el plato fuerte es decir poner las cartas sobre la mesa, dicho de otro modo sacar el tema de la atracción reciproca.     Esto no siempre es fácil de manejar, lo entiendo, se requiere capacidad verbal para introducir lentamente el tema, sin que sea violento para ella, sobre todo si se considera que este proceso se esta gestando en medio de una situación especial (ambos conocen a terceras personas en común). 

Una manera en que podría manejarse este tipo de situaciones es siguiendo la estrategia de un conocido mío, quien manejaba el tema hablando mas o menos en los siguientes términos:  “Bien, quiero decirte que soy una persona que creo tener desarrollada mi percepción.  Puedo ver y sentir muchas cosas que ocurren a mí alrededor.   También tengo, en especial, la capacidad de percibir como reacciona la gente con la que me toca interactuar en algún momento.   Nosotros nos hemos conocido (o encontrado) hace unos días en (citar el lugar o evento).   Allí hemos empezado a conocernos y siento que inicialmente se dio una buena química entre nosotros.    (Hacia una pausa, respiras hondo y sigues hablando).   Creo que también esta química siguió su curso y, a estas alturas creo que se ha convertido en algo importante.   Necesito tu más sincera confirmación sobre esto que siento.   Creo..... (y lo decía así lentamente, mirándola fijamente a los ojos).   Siento que hay una atracción entre nosotros.  Creo que..... yo ... te gusto”

Una pausa breve y remate:  “Lo más lindo de todo es que a mí me pasa lo mismo.   (Concluía enfáticamente)  Me gustas mucho”.  Luego quédate en silencio.

Esta estrategia que según mi conocido la utilizo varias veces es infalible y tiene un efecto totalmente conmocionante en su presa.   Después de enviar el mensaje, observa la reacción de ella.   Si no da muestra de rechazo, pruebas dirigir lentamente tu mano hacia la de ella y tomarla suavemente.  Si no hace o dice nada que indique resistencia, ya este arroz se coció, ya cayo, ya esta consumado.  Puedes intentar besarla.

Ahora bien si trata de evitar que la tomes de la mano, no te desanimes, es el consabido “factor puta”.   Tranquilízala con tus mejores y más tiernas palabras, confronta los sentimientos de ella, anímela a que sea sincera y a permitirse por lo menos preguntarse por que siente ella eso y que le gustaría hacer al respecto.   Se paciente.   Es un momento delicado e importante para ella.   Recuerda que quizás hace solo un par de días te estaba viendo acompañado de su esposo, y que tal vez el esposo de ella la espera en casa.   Se persistente, atrévete. 

En mi caso recuerdo que conocí a una dama en un tren, la primera vez que salimos almorzamos juntos y bueno la cosa no paso a mas, pero la segunda vez que salimos, fuimos al acuario.   Y bueno a la salida del mismo fuimos a un lugar cercano donde se podía ver el mar,  ahí empezamos a platicar y hubo cierta frase que yo le dije la cual me dio la pauta que ahí tenia oportunidad.    Ataque con todo y bueno ese mismo día estabamos en la cama, luego tuvimos una relación que duro bastante tiempo.   

Lo que quiero enfatizar es, mi conocido tiene su sistema, yo tengo el mío, y tu tendrás el propio.    El asunto es atreverse, llegarle a lado emocional y hacerla sentir especial.

Y recuerda

¿Que es lo peor que puede pasar?  Que te diga que no.... pero igualmente puede decir que si.

Suerte cazador y hasta la próxima.