14.6.12

El perfil de la amante ideal (tercera parte)

Joven e inexperta

Un modelo especial de mujer, candidata a ser la amante ideal, es la jovencita inexperta, soñadora y sentimental que anhela una relación que llene su vida.


Tal vez al principio esta joven dama, debido a su educación, rechace la idea de relacionarse con un hombre comprometido o, aun habiendo iniciado la relación con alguno, ella se muestra reacia a continuarla.  No obstante, es muy probable que a causa de la constante convivencia con este cazador infiel, experto seductor, hombre maduro y amante experimentado, finalmente ella se subyugue con tal relación y acabe por entregarse dócilmente.   Será entonces cuando esta Lolita acepte refugiarse cómodamente en los brazos de su amante, sin ningún sentimiento de culpa como para alejarse de ese espacio

He de hacer notar que a partir de la novela Lolita, de Nabokov, se habla del fenómeno de las lolitas, jovencitas audaces y osadas que en total desafía a las mujeres de la generación anterior, presentan una gran habilidad de seducción y al haber resultado altamente beneficiadas por la naturaleza, la combinación de sus atributos hace tambalear los cimientos del mundo femenino adulto

Te trata como siempre soñaste o deseaste


En ocasiones, en la vida de un cazador ocurre que el día menos pensado conoce a una mujer que, naturalmente y sin esfuerzo alguno, tiene la capacidad de prodigarle el trato que siempre ha soñado.  No son pocas las relaciones de este tipo que se han consolidado de la noche a la mañana, debido a que casi mágicamente ambos amantes coinciden en gustos, preferencias, afinidades que facilitan asombrosamente el camino y el tiempo hacia la construcción de una fuerte relación entre ambas personas.

Será entonces cuando ambos cometan sorprendidos:  tenemos poco tiempo, pero pareciera que nos conocemos y estamos juntos desde hace años.   Uno de los primeros resultados tangibles de este tipo de química perfecta entre ambas personas es que una o ambas están en condiciones de darle a la otra el tipo exacto de trato o atenciones que necesita y que tal vez durante mucho tiempo no ha recibido de su pareja oficial, incluso habrá tenido que mendigarlo.
Al recibir este anhelado trato, muy difícilmente un hombre baraja en su mente la idea de alejarse o de dejar a su pareja alterna, puesto que su compañía es muy benéfica, rasgo a partir del cual estas mujeres se les considera amantes ideales.  
Por ejemplo un amigo mío, prospero empresario, a quien conocí mientras estaba casado todavía.  Aun cuando su esposa no era mala persona, no le tenia la suficiente paciencia para ocuparse de los detalles, por ejemplo, cuando llegaba cansado al hogar, ella casi nunca tenia ganas ni tiempo de prepararle la cena, aunque sea de servírsela, si ya la había preparado la empleada de la casa.
Igualmente, cuando salía de viaje, me contaría después este mi amigo, que envidiaba a sus otros amigos por la manera en que sus esposas les ayudaban a preparar su equipaje, les planchaban la ropa necesaria, todo lo que nunca el recibió de su esposa, quien dejaba totalmente estos detalles en manos del servicio domestico.   En fin de la historia fue que un día mi amigo contrato a una secretaria, a la que, entre otras cosas, le correspondían tareas como servirle el café, coordinar el servicio de almuerzo, etc.  Desde le principio, esta dama (no mas joven, ni mas bonita que la esposa), se destaco por su solicitud y fina atención con su entonces jefe, quien declararía luego con sorpresa que ella en poco tiempo lo llegaría a conocer incluso mejor que su esposa, los pequeños y a la vez grandes detalles de sus preferencias personales, como el numero de cucharadas de azúcar con las que le gustaba tomar su café, que tipos de sopas prefería, cuales eran los alimentos que debía controlar por recomendación del medico.   Lo mas llamativo me contó mi amigo era que esta dama demostraba brindar esta atención no como parte de sus tareas asignadas, sino porque le gustaba hacerlo y se ocupaba de ello con agrado y entrega.
Esto lentamente unió a ambas personas, haciendo que el hombre poco a poco se sintiera mas a gusto en la empresa que en su hogar.  Por tanto, haciendo que cada vez mas se quedara hasta tarde a trabajar junto a su secretaria, hasta que un día paso lo que tenia que pasar.  La historia concluyo varios después, cuando este hombre se divorcio, dejo a su esposa, y tiempo después, formo pareja estable con su otrora secretaria y amante.
No fue una aventura ocasional.   Estuvieron juntos durante quince años, hasta que mi amigo falleció a causa de una enfermedad que se complico de manera irreversible, pero mientras duro, los que le conocimos constatamos que realmente eran felices

No hay comentarios:

Publicar un comentario